HISPANIA ANTIGUA

A lo largo del s. I a.C., los contactos entre los pueblos de la zona vascona y los galos dieron lugar a imitaciones de moneda de la ceca de Baskunes. Las primeras copias galas se distinguen de las monedas originales por la progresiva degeneración de la leyenda y del estilo del grabado. Después van añadiendo al diseño elementos iconográficos propios del mundo celta, y se extiende la abstracción característica de las monedas galas, hasta llegar a un anverso con una cabeza totalmente esquemática y en el reverso una leyenda degenerada conocida como tipo “IMONIO”. Así pues, este denario correspondería al primer grupo de imitaciones, posiblemente fechado hacia el 100 a.C. Se trata de una copia del tipo ACIP-1633, que se distingue del original por un estilo del anverso algo más tosco y, sobre todo, por la leyenda BeKoTa, en lugar de BeNKoTa. Su enorme rareza reside, además, en que las imitaciones galas sistematizadas hasta ahora son monedas de bronce y no de plata (aunque se trate de una pieza forrada).